Plaza de Intendente Alvear |
correo va, correo viene, el voz a voz,....... se fue haciendo el camino, con el esfuerzo de todos, con entusiasmo por la idea de reencontrarnos después de mucho tiempo, de conocernos, de compartir la mesa y compartir recuerdos, de los buenos, en particular los de la abuela Ana Margarita Brendel, una de las Parteras y "cura empachos" del pueblo, de nuestras madres que cuando se encontraba con otra hermana, no entendíamos "un pepino" lo que hablaban!!!. Los primos ya, no somos muchos y por esa cosas del destino, vivimos distantes en kms...... no en el afecto, lo impactante es el deseo de los hijos y nietos, por compartir y conocer a familiares de los que no se tenía, ni siquiera conocimiento.
De puro "viejo nomás", les digo que las metas y los sueños muchas veces no se alcanzan, pero lo importante es el camino y el esfuerzo en lograrlo!!!!...
DIOS MEDIANTE, EN EL ENCUENTRO DEL DOMINGO COMPARTIREMOS UN DÍA INOLVIDABLE !!!
RECIBAN UN ABRAZO DESDE EL ALMA, ROBERTO.
ver: Encuentro El Caldén I
La reunión la planearon durante meses. Roberto nos propuso participar y, por suerte, mi papá que tiene un corazón enorme, aceptó sin siquiera pensarlo. La reunión se desarrollaría en Intendente Alvear, la Pampa.
Llegó el esperado fin de semana. Justo días antes empezó un paro de micros de larga distancia. Esto dificulto el traslado de varias personas, sin embargo gracias a una gran gestión de los organizadores, todos lograron llegar a destino.
Estos gestos de amor me llenan de orgullo.En cuanto a nosotros salimos de Lomas de Zamora a las 8:30 de la mañana. Fui con mis papás, mi hermano, mi abuela y dos tíos. El viaje fue muy alegre. Al medio día paramos a almorzar en una excelente parrilla en Lincoln. ¡Todo estaba riquísimo!
y Finalmente... llegó el día...
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El fin de semana pasado viví una de las mejores experiencias de mi vida…
Desde que tengo memoria que escucho a mi tío abuelo, Roberto Quintana, hablar sobre mis antepasados. Él hizo diversos viajes e investigaciones, se contactó con muchísima gente y se esforzó porque cada uno de nosotros conozca y se interese en la familia. Roberto tenía dos sueños: terminar el árbol genealógico y reunir a la familia.
Guiados por el amor y el deseo de unidad mi tío abuelo y otros primos de él hicieron una gran reunión. Contaron con ayuda de mucha gente pero, a mi entender, lo más importante es el ímpetu, ganas de vivir, deseo de unidad, trabajo en equipo y la perseverancia para lograr el objetivo, el sueño, algo que todos veíamos imposible. Admiró muchísimo a estas personas que con un promedio de 70 años lograron lo que yo ni hubiese tenido la fuerza de intentar hacer.Desde que tengo memoria que escucho a mi tío abuelo, Roberto Quintana, hablar sobre mis antepasados. Él hizo diversos viajes e investigaciones, se contactó con muchísima gente y se esforzó porque cada uno de nosotros conozca y se interese en la familia. Roberto tenía dos sueños: terminar el árbol genealógico y reunir a la familia.
Llegó el esperado fin de semana. Justo días antes empezó un paro de micros de larga distancia. Esto dificulto el traslado de varias personas, sin embargo gracias a una gran gestión de los organizadores, todos lograron llegar a destino.
Estos gestos de amor me llenan de orgullo.En cuanto a nosotros salimos de Lomas de Zamora a las 8:30 de la mañana. Fui con mis papás, mi hermano, mi abuela y dos tíos. El viaje fue muy alegre. Al medio día paramos a almorzar en una excelente parrilla en Lincoln. ¡Todo estaba riquísimo!
A Intendente Alvear llegamos como a las 6 de la tarde. Nos hospedamos en Pepa. Cuando llegamos fuimos a ver a Roberto, Lina y Carla. Se los veía muy contentos.
Desde un principio sentí una conexión enorme con el lugar, me pase todo el fin de semana con un nudo en la garganta.
Caminamos por el centro, que es de aproximadamente una cuadra. Entramos a un local de decoración y la mujer nos contó que deja la llave dentro del auto. En ese momento me di cuenta que es un lugar especial, donde me encantaría vivir.
A la noche fuimos a cenar con Lina, Roberto y Carla. Nos llevamos una sorpresa grande cuando aparecieron Inés, Marcelo y Julio.Mi abuela quería ver especialmente a Inés, ellas comparten una linda historia. Me emocionó mucho ver ese encuentro y las reacciones de ambas. Todos juntos pasamos una cena maravillosa, llena de risas, chistes, historias y… ¡Comida.........Llego el día y temprano nos levantamos, desayunamos y salimos a conocer el Pueblo, hermoso por cierto, silencioso y un día luminoso y primaveral
Parados en una esquina nos vino a saludar el que en algún momento fue intendente del lugar y que actualmente es presidente del geriátrico. El nos llevó a ver la casa de mi tatara abuela Ana. La familia que vive actualmente en el lugar nos dejo pasar a todos, nos cebaron mate y nos regalaron cedrón. Me impresionó la bondad de esa gente. Esto sin duda no se ve en Buenos Aires. Tenían una bebita de menos de una semana llamada Janah (Janash). Nos contaron que investigando descubrieron que se significa Ana…Tuvimos que irnos de esa casa más rápido de lo planeado porque era casi mediodía y empezaba la esperada reunión…(Ecoparque),... El lugar era divino, con quincho, animales, pileta y cabañas. La reunión fue súper emocionante, todos querían saber quien era uno, estaban felices, nadie se quejaba de sus problemas… Me sentí en casa. Tengo parientes con mucho talento. Estuvieron tocando y cantando. El momento más emocionante para mi fue cuando Julio cantó con su mamá, Inés. Se me escaparon algunas lágrimas, las primeras del fin de semana. Ella dijo que el hijo le cumplió el sueño.
Al atardecer, nos despedimos e hicimos una salida especial con papelitos de colores que sorprendió a todos. Me fui feliz pero con la nostalgia de dejar un lugar querido.
Lo valioso que me llevo de esta experiencia es el respeto por la familia, personas maravillosas y que cuando uno se propone algo y lo desea con ganas lo puede lograr. Sin contar las historias, frases, chistes y amigos.
Gracias tío abuelo Roberto me enseñaste a amar a esta familia.
Al atardecer, nos despedimos e hicimos una salida especial con papelitos de colores que sorprendió a todos. Me fui feliz pero con la nostalgia de dejar un lugar querido.
Lo valioso que me llevo de esta experiencia es el respeto por la familia, personas maravillosas y que cuando uno se propone algo y lo desea con ganas lo puede lograr. Sin contar las historias, frases, chistes y amigos.
Gracias tío abuelo Roberto me enseñaste a amar a esta familia.
HOLA ROBERTO QUINTANA: QUE EMOCION, TE VAS ACERCADO AL SUEÑO, EN QUE LOS ENCUENTROS,DE TODOS USTEDES, SE VAN HACER REALIDAD, NOSOTROS ESTAMOS EXPECTANTES ESPERANDO LA HISTORIA VIVA DE LOS SERES QUE LA VIDA FUE SEPARANDO Y QUE HOY DECIDIERON REENCONTRARSE PARA UNIFICAR RECUERDOS. ES IMPORTANTE ESTOS MOMENTOS, PUES SE CAPTAN LOS SENTIMIENTOS, QUE AFLORAN EN UN MISMO PENSAMIENTO. UN SALUDO DE PARTE DE TODOS Y UN ABRAZO MIO.
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